A Leandro

En la pequeña luz de Sesto pone
desde el puerto los ojos i, atreuido,
rompe Leandro el mar que, embravecido,
a sus intentos más i más se opone.

Mas él cuida[n]do que la muerte abone
su grande amor, se ofrece al conocido
peligro i, de las ondas ya vencido,
a amansallas en vano se dispone.

“Ondas”, dixo muriendo, “si consiente
vuestro furor de un triste amante el ruego,
sed por un rato a mi dolor piadosas;

“Frenad el curso a la veloz corriente,
mostraos benignas sólo mientras llego,
i cuando buelva me anegad furiosas”.
Translation: 
Language: 
Rate this poem: 

Reviews

No reviews yet.